24 noviembre, 2025

Navidad

 

  1. Si tu Navidad se partiera en dos fotografías —una mitad llena de abundancia absurda (árboles que dan jamón, regalos que se multiplican solos) y la otra mitad vacía—, ¿qué detalle pequeño uniría las dos mitades?

  2. Imagina que tu mesa de Navidad apareciera fusionada con otra mesa en un país donde solo hay un plato. ¿Qué conversación surreal tendrían ambos platos?

  3. Si la ilusión navideña tuviera dos caras —una sonríe demasiado y la otra está cansada—, ¿qué frase contradictoria dirían a la vez?

  4. Si pudieras escuchar los pensamientos del primer mundo y del tercer mundo durante la Navidad, ¿qué diálogo absurdo o irónico sostendrían mientras tú meriendas polvorones?

  5. Imagina que tu árbol navideño se reflejara en un espejo que no muestra luces, sino realidades duras. ¿Qué adorno de tu árbol sería el más incómodo al verse duplicado?

  6. Si la palabra “Navidad” apareciera escrita partida en dos: “Navi” alegre y “Dad” triste, ¿qué objeto surreal sostendría cada mitad para explicar lo que vive?

  7. Una mitad de tu salón muestra risas y sobremesa; la otra mitad, silencio incómodo y falta de todo. Si ambas mitades se pudieran abrazar, ¿qué gesto absurdo compartirían?

  8. Si el espíritu de la Navidad fuese un ser bicéfalo —una cabeza tiene gorro, la otra casco de obrero—, ¿qué debate insólito tendría sobre lo que realmente importa?

  9. Imagina que tus regalos aparecen recortados en collage junto a imágenes de personas que no recibirán ninguno. ¿Qué diálogo surrealista tendrían los objetos envueltos y los no-envueltos?

  10. Si una postal navideña tuya se montara en estilo Uğur Gallenkuş, con tu foto feliz a la izquierda y una situación dura a la derecha, ¿qué elemento grotesco o simbólico uniría ambas escenas (una cuerda, una mirada, un calcetín roto, un muñeco derretido…)?

  11. Si tu foto familiar de Navidad se partiera en dos y en la otra mitad apareciera alguien que no eligió dónde nacer, ¿qué objeto tuyo intentaría saltar a su lado, como pidiendo perdón?

  12. Imagina que cada burbuja del brindis explotara mostrando durante un segundo una realidad del mundo: guerras, migraciones, hambre. ¿Qué burbuja te habría resultado imposible de mirar de frente?

  13. Si tu jersey navideño calentito se reflejara en un espejo que muestra a personas sin abrigo, ¿qué parte del dibujo del jersey se derretiría primero?

  14. Supón que cada calorcito de hogar que sentiste en diciembre generara una sombra fría en otro lugar del mundo. ¿Qué sombra te seguiría todavía hoy?

  15. Si tus regalos estuvieran envueltos con una capa invisible de privilegio, y pudieras ver lo que ocultan, ¿qué caja no podrías abrir sin sentir que algo dentro se encoge?

  16. Imagina que el mantel de tu cena estuviera cosido por manos que viven con menos de lo que cuestan los entrantes. ¿Qué puntada del mantel te contaría la historia más incómoda?

  17. Si el villancico que cantaste suave en tu salón sonara al mismo tiempo en un refugio donde nadie canta, ¿qué verso se rompería por completo?

  18. Si cada vez que abriste una ventana del calendario de Adviento se cerrara una ventana en otro lugar del mundo, ¿qué día te habría dolido más descubrir ese intercambio surrealista?

  19. Imagina que la cámara de tu móvil captara no solo tu sonrisa, sino también a quienes no tuvieron motivos para sonreír en diciembre. ¿Qué rostro, borroso pero presente, aparecería detrás de ti?

  20. Si el espíritu de la Navidad te dijera la verdad sin filtros, pero usando una metáfora esperpéntica —un árbol que sangra luz, un muñeco que deja de moverse, un turrón que se agrieta—, ¿qué te estaría diciendo realmente sobre el mundo?

  21. Si una foto de tu familia en Navidad se pegara, sin avisar, a la foto de una familia que no pudo reunirse, ¿qué gesto de tu familia se vería de repente demasiado grande… o demasiado pequeño?

  22. Imagina que cada abrazo que diste estas fiestas proyectara una sombra sobre otra parte del mundo donde los abrazos no existen. ¿Qué abrazo tuyo generaría la sombra más larga?

  23. Si las risas de tu sobremesa se oyeran al mismo volumen en un lugar donde solo hay silencio, ¿qué risa te daría vergüenza escuchar tan alta?

  24. Supón que cada plato lleno de tu mesa estuviera conectado, por un hilo invisible, con una familia que come menos de lo esencial. ¿Qué plato tiraría de ese hilo hasta incomodarte?

  25. Si una discusión familiar pequeña —de esas tontas— se reflejara al lado de una familia que solo pide estar junta, ¿qué frase tuya aparecería deformada en el contraste?

  26. Imagina que el calor humano de tu casa se derramara como un líquido y, al caer al suelo, revelara lugares donde falta ese calor. ¿Qué charco de tu Navidad marcaría un vacío ajeno?

  27. Si cada fotografía feliz se duplicara en otra que muestra ausencias, pérdidas o distancias, ¿qué detalle de tu foto destacaría sin que tú lo hubieras visto antes?

  28. Si el cariño que recibiste estas fiestas se pudiera medir con una luz, y la misma luz iluminara hogares donde nadie la recibe, ¿qué parte de tu luz te pediría que la compartieras?

  29. Imagina que tu familia estuviera dibujada en dos estilos a la vez: uno lleno de color y otro casi borrado. ¿Qué miembro brillaría demasiado y quién quedaría peligrosamente difuminado?

  30. Si el amor familiar pudiera viajar, pero para llegar a tu casa tuviera que pasar primero por lugares donde no hay amor, ¿qué forma tendría cuando llegara? ¿Qué heridas metafóricas traería?

  31. Si el vínculo con tu familia fuera un hilo rojo que atraviesa dos fotografías —una luminosa y otra rota—, ¿en qué punto del hilo se ve el nudo más tenso y cuál sería el gesto mínimo para aflojarlo?

  32. Imagina que cada herida emocional familiar se manifestara como una grieta en la pared, pero al lado de esa grieta apareciera otra pared donde alguien intenta repararla. ¿Qué herramienta simbólica usarías tú para empezar a arreglar la tuya?

  33. Si el silencio de tu casa fuera un animal dormido, y la reconciliación un animal despierto, ¿qué pasaría si ambos se miraran a los ojos estas Navidades?

  34. Supón que una conversación pendiente —esa que nunca se tuvo— apareciera escrita en un papel quemado por la mitad. ¿Qué palabra sobrevivió al fuego y qué revela sobre el vínculo?

  35. Si una herida familiar antigua se convirtiera en una sombra que te sigue, y la reconciliación en una pequeña luz que intenta alcanzarla, ¿en qué momento del año pasado estuvieron más cerca de tocarse?

  36. Imagina que una fotografía de tu infancia se pegara al lado de una foto reciente donde no todo está bien. ¿Qué detalle del niño/a que fuiste pediría a gritos que cuidaras el vínculo?

  37. Si el perdón fuera un puente, pero uno de los lados está construido y el otro no, ¿qué ladrillo surrealista pondrías tú para empezar a unir ambas orillas?

  38. Si una palabra dura que dijiste estas fiestas se transformara en una piedra, y un gesto de cariño se transformara en una flor, ¿cuál de las dos pesaría más al colocarlas sobre una balanza emocional?

  39. Imagina que tus vínculos familiares aparecieran representados como figuras de arcilla: algunas firmes, otras agrietadas. ¿Qué grieta merece atención antes de que se rompa del todo y qué gesto pequeño podría repararla?

  40. Si una reconciliación posible se mostrara ante ti como una puerta vieja entreabierta, pero al abrirla aparecieran dos versiones de tu familia —una que sigue igual y otra que mejora—, ¿qué diferencia habría entre ambas imágenes?